Yo sugiero escuchar esto mientras se lee, pero ya será a gusto de cada quien... https://www.youtube.com/watch?v=3GOVrGzkWrY
-Así es que 6 años
-Pues sí... ¿qué rápido no? A veces me pregunto si me haces en el mundo...
-Pues... ¿tú qué crees?- me lo dijo con una sonrisa cuya intención clara era sonrojarme
Yo sonreí de vuelta sin quitar mis ojos de los suyos, solo bajando ocasionalmente a ver sus labios...
-Aunque me creas tan ?rocker? como tú dices, sí he leído algunas de las historias que escribes...
-¿Y?... Dame tu opinión más objetiva
-Bueno, son dulces en su mayoría, y en más de una ocasión me han llevado a fantasear...
-Ay ¿a poco? ¿lo dices en serio? ¿Y cómo cuáles lograron ese maravilloso efecto en ti?
-Más que historias completas, en muchas de ellas eran momentos específicos...
-Mmmhhh ¿momentos?
-Sí
-¿Por ejemplo?
-Por ejemlo... cuando describes con todo detalle, pero a la vez con cierta sutileza la forma cómo te hago el amor- para ese momento ya se había acercado y
jugaba con las puntas de mi cabello, mientras me miraba de una forma que a mí me estaba empezando a provocar arritmia
-Ayy, ya me dio pena
-Pena, ¿por qué?
-Pues porque es algo muy íntimo y de alguna forma yo crucé sin tu autorización esa barrera que en teoría debería ser infranqueable o por lo menos no publicable, pero es que disfruto tanto escribirte...
-¿Qué sientes cuando lo escribes?
-Fernando Colunga, ¿qué pretendes? ¿Que me dé aquí un síncope? -le dije mientras me mordía el labio y reía de puros nervios
Me regaló una caricia juguetona en la mejilla...
-No, digamos que me mueve un poco la curiosidad y otro poco... -y se silenció, mientras me veía de nuevo con esa mirada y esa sonrisa que eran para mí una
clara invitación, aunque fingí no darme cuenta
-¿Otro poco?
-No nada, anda por favor cuéntame...
-Ay no me gusta que me dejen con la duda...
-Bueno, te diré el segundo ?otro poco?, después de que me comentes lo que vives al escribir esos momentos.
-Bueno está bien... Al escribirlo y describirlo, la mente es tan tremendamente poderosa que voy sintiendo cada beso, cada caricia, siento como tu barba
raspa suavemente mis mejillas, siento como tus manos realizar recorridos con ternura, y bueno...
-Continua por favor...
-Es que me da pena...
-No te apenes, toma esto como una plática entre artistas, estamos explorando el arte desde los sentimientos y desde los sentidos...
-Bueno, pues de alguna forma también percibo la magia cuando me haces tuya y me llevas de tu mano, con tu masculinidad, al borde del cielo- Para ese momento estaba completamente roja, él me veía atento y acariciaba el color rosa intenso y el calor que salía de mis mejillas. Se acercó y me abrazó con tanta ternura, pero a la vez sentía su fuerza, su hombría despierta, me acariciaba el cabello.
Y mientras lo tenía abrazado, le dije al oído...
-Dijiste que si yo te lo decía, tú también me dirías qué era ese ?otro poco?, dijiste que estamos entre artistas y antes de separarme para volver a conectarme con sus ojos, no pude evitarlo y le di un beso en la mejilla muy cerca de su boca.
Él sonrió, se separó un poco y sosteniéndome la barrilla y sin dejar de mirarme me dijo...
-Realmente no es otro poco, es otro mucho y creo que con mi abrazo te diste cuenta de la reacción de mi cuerpo al escucharte, se llama deseo... Hay un deseo que me provocas con tus escenas, porque así como tú me imaginas y me sientes, yo también lo hago contigo, imagino a esa mujer que aunque no la tenga frente a mí, es una mujer que intima conmigo en su mente a través de su escritura, que se entrega a mí en su imaginación, y aunque tú no lo creas, despiertas en mí un tipo de deseo intenso y muy diferente al deseo normal. Hay un tipo de ingrediente con cierta magia, con incertidumbre, con inteligencia, que provoca que al leerte te imagino haciéndote mía, mientras te observo y te sumerges en un lago conmigo... extasiada, viva...
Para ese momento la respiración me estaba traicionando, se había convertido en una delatora de mi propio sentir al escucharlo decir eso...
-Bueno, entre artistas nos entendemos...
Yo sólo asentí, la voz ya no me salía...
-¿Te gusta la escultura?
-Sí
-¿Has esculpido alguna vez al amor? -me preguntó
Lo veía intensamente a los ojos, no quería dar una respuesta equivocada, adelantada o apresurada...
-¿Tú que crees? -le volteé la pregunta para ganar tiempo...
-Yo creo que tal vez sí, pero de algo estoy seguro, de que nunca has esculpido el amor con magia pura, sin expectativas, sólo dejándote llevar...
-Es muy posible, no sé cómo hacerlo
-Te quiero enseñar... ¿Podría?
Yo sólo asentí, preparando mi alma para ese viaje al que él me estaba invitando en ese momento...
Entrelazó los dedos de sus manos enormes con los dedos de las mías y me besó en los labios y despacio, sin ningún tipo de prisa o expectativa diferente al amor y a la magia, nos fuimos descubriendo poco a poco, se desabotonó la camisa y puso mis manos muy cerca de su corazón, suavemente lo fui recorriendo con mis yemas, mientras él me besaba el cuello e iba separando de mi piel tibia, el lienzo de encaje blanco de mi camisa... Se tomó todo el tiempo necesario...
Sentía unos deseos enormes de descubrir la inquietud que aguardaba en el sur de su cuerpo, pero me contuve y viví cada segundo con él, y cuando el deseo se encontraba en franco asenso, sentí como su amor firme y cálido, se fue adueñando de mis susurros y de mis suspiros, que se avivaban con esa fortaleza protectora y llena de amor que él me estaba regalando a través de su cuerpo, mientras yo estaba prendada a él, siguiendo el ritmo que su amor me iba marcando, y en ese momento me sabía a su voluntad, viajando con él hacia las estrellas en esos segundos en los que volamos por el universo a voluntad.
-Te amo -me dijo mientras me besaba la frente y se quedaba dormido sosteniéndome en sus brazos
NOTA al admin: Querido Don Admin, lo slaudo y le
comparto que se ha vuelto complicadísimo subir temas, desde Chrome y
desde Edge es imposible, solo me dejó hacerlo por Firefox :s