El equipo de Colunga Team y yo te damos la Bienvenida a nuestra casa. Deseamos que te diviertas y que convivas con respeto y cariño con los demás integrantes de nuestra gran Familia.
PRÓLOGO
Faltaban solo unos meses para que se cumplieran 2 años desde aquel aparatoso accidente en el que perdió la vida su esposa y su bebé, el que la fecha casi se acercara ponía de malas a José Antonio, aún los recuerdos estaban muy presentes,
José Antonio se había dedicado tanto al trabajo desde que Melanie murió, se había olvidado de asistir a las reuniones con sus amigos, de divertirse, salir a pasear o dedicar tiempo para él, incluso se había cerrado para el amor, su mundo se había vuelto gris desde que perdió a Melanie, sentía que nada tenía sentido para él y por eso se refugiaba en sólo trabajar y trabajar. No solo le dolía la perdida de Melanie, realmente lo que más le dolía era la perdida de aquel bebé que no pudo conocer ni cargar entre sus brazos y aunque no lo externaba se sentía algo culpable, pues habían discutido un día anterior por lo que Melanie la había dicho que se iría unos días con sus papás, él no quería que fuera pero no pudo ni quiso detenerla, si tan solo la hubiera detenido se ?decía- constantemente, aquella tarde era lluviosa, al parecer Melanie no había tenido precaución pues manejaba a alta velocidad, y en una curva peligrosa perdió el control del auto ocasionándose el trágico accidente donde perdió la vida, al parecer Melanie nunca supo que estaba embarazada, cuando se realizó la autopsia el médico determinó que tenía casi 9 semanas de embarazo, eso fue un golpe duro para José Antonio.
Gabriela una joven hermosa y de buenos sentimientos también había sufrido a causa del amor, su antiguo novio solo se había burlado de ella, la había utilizado y extorsionado dejándola en múltiples deudas, ella misma se había jurado que jamás de los jamases se enamoraría otra vez, pues el enamorarse solo le había traído decepciones y sufrimientos, lo único bueno de esa relación es que había tenido a su hija Daniela, A pesar de que contaba con el apoyo de su madre Judith, se sentía sola desde que su papá unos meses atrás había fallecido, pero a pesar de ese dolor que aún sentía, su hija era quien se había convertido en su motor de vida y en sus motivos para salir adelante y luchar por su hija.
Aunque se desempeñaba como diseñadora de interiores últimamente no tenía mucha suerte pues a pesar de había logrado trabajar en una empresas importante su ultimo empleo fue de muy corto plazo por lo que había quedado sin empleo y los gastos en casa crecían y crecían. Ella había nacido en Venezuela, sus papás la llevaron a los Estados Unidos desde que era muy pequeña, había logrado obtener su residencia y su niña si tenía la nacionalidad, lo que le preocupaba era su mamá, cada vez era más difícil obtener documentación en regla.
CAPITULO 1
Estaba sentada en la sala de espera, sentía nervios, esa entrevista de trabajo era importante para ella, además había oído que era una empresa de prestigio y que su dueño era hombre de muy buen parecer.
?¿Gabriela Ortiz ? ?preguntó la secretaria al abrir.
? Sí. Sé que llego un poco pronto, pero como no estaba segura de dónde era...
?No se preocupe señorita ? le dijo la mujer con una sonrisa
?Soy , la secretaria del Sr. San Román. Sígame y la llevaré hasta su despacho.
Gabriela respiró hondo, estaba nerviosa por la cita que tenía. No solo por la cita. Se sentía como si una mano invisible la guiara, y eso le provocaba una sensación extraña.
Gracias a una búsqueda por internet que hizo sabía que esa empresa era del señor José Antonio San Román que era de México pero que radicaba en Miami, que era un hombre de negocios que poseía una cadena de bienes raíces Y estaba buscando un decorador para dar los últimos retoques al nuevo edificio que albergaría las oficinas y que estaba situado a una hora hacia el norte de Miami.
Gabriela sentía que su corazón latía muy rápido. La
secretaria la guio por el pasillo y se detuvo frente a una puerta abierta.
Gabriela entró a la oficina y se encontró cara a cara con José Antonio San Román. El hombre tenía un traje negro, era alto, tenía el cabello oscuro y unos ojos claros color miel que reflejaban cierta tristeza, parecía muy concentrado en su trabajo.
«Pero que guapo es este hombre », pensó ella.
Cuando él se puso en pie para saludarla, sus miradas se cruzaron y Gabi sintió que el corazón le daba un vuelco.
? ¿Señorita Gabriela? ?preguntó él y extendió la mano para saludarla.
Ella la aceptó. Sintió la firmeza de su saludo, se fijó en que
Tenía la piel cálida y bronceada y se sintió aliviada al no experimentar nada extraño.
? Sí, soy yo. Encantada de conocerlo.
Él la soltó e hizo un gesto para que tomara asiento en la silla de cuero que estaba junto al escritorio.
-Dígame por qué le gustaría decorar mis oficinas.
Después de que Gabi se acomodara, él se sentó de nuevo en
su silla sin dejar de mirarla. Ella no podía creer que por fin se encontraba frente a ese hombre tan galante, un hombre al que encontraba muy atractivo.
Puso su bolso sobre sus piernas y comenzó a explicar:
-Tengo entendido que es un proyecto grande... cuatro plantas de oficinas. Me gustaría trabajar en un proyecto así, empezando de cero y eligiéndolo todo, desde los muebles, hasta el color de las paredes.
José Antonio miró los papeles que tenía sobre la mesa.
-Veo que, usted ha decorado departamentos y casas. ¿Por qué cree que tiene las cualidades necesarias para realizar un trabajo como este?
-Supongo que quiere que sus oficinas reflejen algo acerca de usted, de su negocio, y de cómo lo gestiona. No es muy distinto a decorar una casa y satisfacer los gustos de un cliente.
-Supongo que no -sin dejar de mirarla, añadió-, hay un paró de dos años en su vida laboral, y en los últimos meses solo ha realizado un par de encargos pequeños. ¿Puede contarme cuál ha sido el motivo?
Podía contárselo todo, hablarle que había tenido una bebé , y que el padre de su hija la había abandonado, que su padre había muerto, pero si lo hacía < no creo que a él le importe mucho > se decía ella.
-Tuve algunos problemas de salud -le explicó-. Ahora ya están solucionados y estoy preparada para retomar mi carrera profesional.
Él se quedó pensativo y Miro su curriculum
-¿Y por qué aquí, en el norte de Miami y no en Los Ángeles donde vivía ?
-Necesitaba un cambio. He oído que Miami es un lugar muy agradable para vivir. Tengo buenas referencias, así que he decidido empezar de nuevo, si me dan este trabajo.
-¿Y si no? -preguntó él arqueando las cejas.
- Quizá me quede una temporada para ver si hay otras posibilidades.
Tras un largo silencio, José Antonio le preguntó:
-¿ Ya Tiene algún sitio donde quedarse o piensa viajar constantemente?
_ Por lo pronto estoy rentando un departamento.
Al mirar a José Antonio, Gabi sintió que entre ellos había algo más que palabras, y se preguntaba si él también lo notaba.
José Antonio miró de nuevo el curriculum de Gabi y frunció el
ceño.
-Tiene un curriculum muy completo.
Mientras él hablaba
Ella podía oler el aroma de su colonia. Como era alto y tenía anchas espaldas, daba la sensación de que llenaba todo el espacio del despacho.Él Se inclinó sobre el escritorio y dijo:
-En su curriculum no pone si está casada o no.
Gabi sentía la necesidad de contárselo todo. Pero no podía hacerlo. No era el momento. Asi que le dijo
- Soy soltera.
¿Sin compromisos? Pregunto él
La mirada de sus ojos color miel era retadora, y Gabi sospechó que cualquiera que trabajara con José Antonio tenía que tener mucha entereza.
-No. No tengo más compromisos. Había pensado centrarme únicamente en el trabajo. Contestó ella
Él asintió.
José Antonio intentó mantener la mirada al frente en lugar de mirar a Gabi y trató de analizar sus pensamientos y la reacción que había tenido ante esa mujer. Se sentía muy atraído por ella, y eso lo desconcertaba. Nunca se había fijado en las mujeres después de la muerte de Melanie.
«Gabi tiene los ojos marrones, como Melanie .Melanie ».
Todavía pensaba mucho en su esposa y en la discusión que habían tenido la tarde anterior del accidente. Le resultaba imposible dejar de pensar en ello. Cuando ella murió, su mundo se derrumbó, y él había tratado de reconstruirlo... trabajando largas horas. Pero... cuando Gaby entró en su despacho...algo ocurrió, pues se sentía atraído por ella.
-Es evidente que sabe lo que hace -le dijo Oswaldo -,
preséntese mañana en las oficinas El trabajo es suyo, si lo quiere. Mañana por la mañana puede venir a firmar el contrato y a comenzar las obras.
Gabi se quedó sin habla durante unos segundos, después se recuperó.
- ¡Eso es estupendo! No puedo esperar para empezar.
Oswaldo la miró fijamente.
Gabi se puso de pie para despedirse , con un gesto Oswaldo le extendió la mano con dirección hacia la puerta de la oficina y le dijo:
-vamos la acompañaré hasta recepción-
Gabi salió y José Antonio no pudo evitar fijarse en ella mientras caminaba hacia la recepción.
Había algo en ella que hacía que se le acelerara el corazón. Le gustaban las mujeres con el pelo largo, pero a pesar de que Gabi lo tenía corto y castaño, le quedaba muy bien. Los rayos del sol que entraban por la ventana, hacían que pareciera que tenía mechones dorados. El collar de perlas que llevaba hacían juego con el blazer que llevaba y su vestido.
José Antonio la guio por el pasillo y se fijó en el perfume que llevaba, se sintió como si estuviera despertando de un largo sueño, de nuevo se fijaba en el cuerpo de una mujer, en la silueta de Gaby .
Mientras caminaban le decía:
-En cuanto a los problemas de salud de los que me habló... ¿está segura de que se ha recuperado? Los plazos son importantes, y si existe alguna posibilidad de que no pueda terminar el trabajo... -parecía preocupado-. Me pondría en un aprieto.
-Estoy bien. De veras -le aseguró-. Nada me impedirá trabajar y terminar en la fecha prevista.
-De acuerdo. En cuanto al sueldo... -le dijo una cantidad más que razonable.
-Me parece bien ?Melanie había decidido que no le importaba el sueldo siempre que tuviera trabajo para solventar su familia y estar cerca de aquel hombre por el que se sentía atraída.
-Trato hecho -dijo él con una sonrisa, y le tendió la mano.
Cuando ella se la estrechó, ambos sintieron algo parecido a una corriente eléctrica. De pronto, la mirada de José Antonio reflejó una barrera interior.
Él le soltó la mano y se alejó de ella y dijo:
-La veré mañana por la mañana.
Ella asintió
Gabi salió de aquel lugar emocionada aun no lo podía creer el trabajo era suyo, inmediatamente habló a su mamá.
-si ¿bueno?...
-mamá saluda a la diseñadora de la empresa Kores & More, Inc.
-hija pero que emoción Gracias a Dios, yo sabía que ese trabajo era tuyo.
-¿Cómo está mi pequeña, pásame a Danielita por favor'
-mi princesa hermosa ¿cómo estas?, mami ya tiene trabajo de ahora en adelante ahora si te va a comprar muchas, muchas cosas mi amor, te amo.
Hablando ya con su madre:
-besitos mamá llego en un rato.
Continuará...