- Hola...

- Hola Atardecer, ¿qué tal?

- Bien... Sabes, me alegra de que seas el Director...

- Y a mi que formes parte de ello y que estés aquí...

- ¿Aunque no siempre sea posible...?

- Aún así... ¿Me permites un abrazo...?

- Claro que si... estaba por pedírtelo. Gracias.

- Ven aquí... Empezamos en 10 minutos, si? Todo irá bien.

 

En la laguna... 1,2,3... grabando!!

 

 

Miguel salió de la casa con una sensación de desgarro por dentro. Cómo le dolía dejarla allí... sola. Se montó en el coche y aceleró tratando de coger fuerzas y poder seguir hacia delante sin volver.

Carla, se había despertado sobresaltada y enseguida se percató de su ausencia y de la nota. Se levantó yendo hacia la ventana, y pudo ver la polvareda que él dejaba en el camino. No pudo evitar que sus ojos se humedecieran. Algo por dentro se derrumbaba y le inquietaba... pero confiaba en él, sabía que volvería.

Fue hasta la cama metiéndose en ella y allí, con la nota en la mano, abrazó la almohada embriagada por el olor corporal de Miguel, pensando en él y confiando en que aquello tan bonito que sentían pudiera seguir.

Por su parte él, transitaba por la carretera, acompañado de la luna y con los pensamientos en ella, con dolor pero con fuerzas para volver en cuanto le fuera posible y con la esperanza de que eso tan lindo continuara... aunque a la vez era consciente que le asustaba, si... pues aquello que sentía por Carla, no le había sucedido antes con ninguna mujer con las que había estado.

Eran unas nueve horas de camino. Miguel podría haber cogido un vuelo, pero prefería hacer ese viaje en coche. Cuando llegó, pensó en llamarla antes de irse a descansar, pues tenía su numero de teléfono ya que ella el día del juicio se lo llegó a dar. Marcó pero no lo cogía. Por la hora que era estaría con su hermana e igual no lo llevaba. Así que llamo a su casa para avisar de que había llegado bien. Él al día siguiente se incorporaba al trabajo y quería ponerse antes un poco al día sobre los casos que estaban pendientes, así que tendría la tarde algo ocupada.

Carla en cambio, estuvo toda la mañana mirando su reloj. No sabía como estaría él, tampoco quería preguntar a Isabela. Así que se fue a comer y cuando llegó la tarde, al ver que la chica no le comentaba nada, intrigada le preguntó:

- Isabela, sabes algo de tu hermano Miguel...?

- Ah, sí.. se me olvidó decirte. Me comentó mi padre que llamó y que llegó bien. ¿Estabas preocupada?.

- Bueno un poco, más que nada porque es un viaje largo. Pero ya estoy tranquila.

Le hubiera gustado preguntarle si dejó dicho algo para ella, pero pensó en que no era buena idea hacerlo.

Cuando volvía para la casa de la laguna, sentía un vacío grande, todo lo que veía le recordaba a él. Que le sucedía?, en poco tiempo aquel hombre había conseguido envolverle de tal manera, que ya no podía quitárselo de la mente ni de su interior.

Al llegar vio el móvil y tenía varias llamadas perdidas. Una de ellas era de Salvador, lo cual no le extrañaba, pues últimamente le había llamado varias veces y ella aún no le había devuelto la llamada pues no había encontrado el momento oportuno. Otra era de su amiga Lidia, la cual era reciente. Las otras dos no sabía de quien pues era un número desconocido, aunque pensó que igual era Miguel. Recordó que en algún momento le llegó a dar su numero de móvil, aunque ella no tenía el de él, y sonrió al darse cuenta de que había estado también con él que ni siquiera se percató de pedírselo al marcharse...  Hasta ahora habían estado juntos y no lo había necesitado por lo que ni se le pasó por la cabeza. Pero a la vez pensó que igual era de alguien que se equivocó, pues al haber llamado a su casa Miguel daría por hecho que alguien le iba a decir a ella... además, tampoco estaba segura que el hubiera grabado su numero aquel día. Ya vería como hacía, igual se lo pedía a Isabela...

Había llegado la noche y se iba a la cama, aunque no podría dormir. Solo pensaba en que se terminaba el día y no había conseguido hablar con él. Trató de despejar la mente y se puso a leer. Tras un rato haciéndolo apagó la luz y trató de conciliar el sueño. En ese momento sonó el teléfono y rápidamente lo alcanzó con la esperanza de que fuera él.

- Si?

- Carla?

Al escuchar su voz, ella sintió que algo comenzaba a temblar en su interior.

- Hola Miguel, me alegra escucharte. ¿Qué tal?

- Mi linda, no muy bien, pues te echo de menos y cuánto daría por estar ahí contigo... Pero bueno, cuéntame y tú?

- Bien, tu hermana ha avanzado mucho hoy. Ya cada vez está más suelta y estuvimos...

- Carla... - le interrumpió él-.

- Si?

- ¿Cómo estás tu...?

- Bueno, yo... a mí también me gustaría que estuvieras aquí. Te extraño tanto Miguel. Esta madrugada cuando...

- Tenía que irme, disculpa que lo hiciera así pero... era lo mejor.

- Lo se...

- Pero ya te lo dije, volveré... no lo impidamos si?. Démonos esta oportunidad...

- Pero no es fácil, no va a serlo...

- Lo se guapa, pero dejemos que el tiempo y nuestros sentimientos digan... si?

Miguel empezó a bromearle hasta hacerla reír. Y así entre risas y agradable charla, le comentó que le había llamado cuando llegó del viaje y que ahora lo hacía en la noche porque al final la tarde fue un poco completa, pues estuvo poniéndose al día sobre algunos casos.

- Miguel, cuídate mucho si?... No te arriesgues demasiado por favor.

- Todo irá bien guapa, no te preocupes. Un beso. Y cuídate tu también.

 

 

Los días fueron transcurriendo. Cada uno con su rutina, su diario... en el trabajo, con los compañeros o amigos, pero al llegar a la casa, en la noche... a ambos, se les hacía aún más duro, aunque lo sobrellevaban algo mejor con alguna conversación vía teléfono, a través de escuchar sus voces y risotadas.

Miguel seguía con los casos que tenía pendientes, unos más arriesgados que otros. Sus días estaban bien ocupados, no sólo por la cantidad de trabajo sino por la dedicación al mismo, tratando de resolver cada expediente de la forma más rápida y eficiente posible. El tiempo que le quedaba libre lo dedicaba a practicar deporte o compartirlo con algunos amigos y conocidos.

Mientras tanto Carla continuaba con las clases de Isabela, las cuales requerían más tiempo y dedicación pues cada vez era mayor la mejoría que presentaba la chica, además de que su estado anímico era mucho más positivo gracias a la visita de su hermano mayor aconsejándole que su actitud debía cambiar, por lo que practicaban otro tipos de ejercicios además de planear alguna que otra salida como pasear o tomar algo fuera de la casa, pues cada día tenía más posibilidad de disfrutar de todo ello, y anteriormente había sido muy reacia a hacerlo incluso insistiéndole.

Por todo ello, es que Carla se sentía muy animada y sobrellevaba mejor el estar lejos de él. También aprovechaba para quedar alguna que otra vez con Lidia y otros amigos, así como continuar con su vida como antes de conocerle a él.

Salvador había vuelto a llamarla y estuvieron hablando. Él insistía como otras tantas veces en quedar con ella para verse, pero una vez más se excuso y lo evitó, pues sabía el motivo por el que lo hacía y también que no podía corresponderle, siempre lo tuvo claro y ahora mucho más.

En la casa principal todo continuaba bien. Fran seguía en su trabajo y por el momento sin meterse en líos, aunque había días que llevaba peor la imposibilidad de estar con Carla o simplemente tenía alguna noche loca con consecuencias al día siguiente, debido a la ingesta de alcohol. Los padres echaban de menos a su hijo mayor... cada vez más, llevando peor su lejanía y sobre todo ahora que su relación había mejorado.

Habían pasado un par de semanas y aunque Miguel seguía muy ocupado en su trabajo, extrañaba mucho a Carla, así que pensó en ir a verla. Ese viernes él había llegado muy tarde pero aún así la llamó para decirle. Intentaría coger un vuelo... y de no ser posible, de igual manera marcharía. Ella al saber la noticia se puso muy contenta y lo esperaba con mucha ilusión.

Fue posible coger un vuelo temprano y el sábado en la mañana, tras dejarlo el taxi en el camino, donde el le indicó, antes que nada pasó por la casita de la laguna... para despertarla y gozar una vez más junto a ella e impregnarse de aquello tan lindo que sentían.

Mas tarde, tras saludar a su familia, la cual se llevó una alegría pues no lo esperaban tan pronto, ya que no era lo que acostumbraba a hacer, marcharon él y Carla para disfrutar de un paseo por la playa así como más tarde lo harían de una sencilla y agradable comida en un precioso y particular lugar donde se dejaron cautivar por la belleza y sencillez de los espacios naturales, pudiendo gozar de una tranquilidad y compenetración increíble entre ambos. Donde cada momento era especial, ya fuera conversando, riendo y bromeando o simplemente agarrados observando en silencio hacia el mismo horizonte, todo ello entre miradas y gestos de complicidad.

Pasaron la noche juntos, así como al día siguiente continuaron disfrutando el uno del otro tranquilamente en la casa de la laguna, charlando, compartiendo y amándose sin más. Resultó un fin de semana extraordinario para ambos.

Miguel aprovechó el final de la tarde para estar un poco con la familia. Le hubiera gustado saludar personalmente a Alex, pero le resultó imposible pues no tenía tiempo. Le avisó de ello por teléfono y su amigo lo comprendió perfectamente. Después tuvo que marchar pues, aunque no lo quisieran volvía la realidad... pero aún así, estaban satisfechos por todo lo bonito e interesante que le aportaba aquello que sentían.

No permitió que Carla lo llevara hasta el aeropuerto como le sugirió. Prefirió que se quedará allí y avisó un taxi.

- Cuídate mucho Miguel, si?

- No te preocupes. Quiero que tú estés bien.

- Si, lo estaré... pues me quedo con un recuerdo muy lindo de lo que hemos vivido durante este tiempo. Y en nada nos volveremos a ver... - dijo ella sonriéndole-.

- Así es. He disfrutado mucho de cada momento... Carla, y me gustaría continuar haciéndolo - le susurró mientras la atraía hacia sí.

- A mi también... y no quiero pensar, solo disfrutar de ello, - le dijo ella acariciando su rostro y besándole suavemente los labios -.

- Sabes, has calado muy dentro mío y aunque reconozco que aún me inquieta..., me apetece vivirlo. Recuerda mi linda... volveré.

Y tras besarla y abrazarla, se dirigió hasta el taxi que le esperaba y se marchó...

 

Continuará...  Un abrazo. Atardecer.

 

PD: A todos los que siguen y confía en esta historia, les pido disculpas por el retraso, pero no me fue posible antes. Lo siento. MUCHAS GRACIAS.

 

QUE BUENO QUE VOLVISTE SE TE NECESITA EN ESTE FORO UN BESOTE   DEO

Gracias Atardecer por la continuación de relato,. Esta genial,.me dejas ansiosa esperando el siguiente

MUCHAS GRACIAS ATARDECER,MARAVILLOSO CAPÍTULO,ESPERAREMOS EL PRÓXIMO IMPACIENTES...OJALÁ TE INSPIRES PRONTO...UN ABRAZO...

hola atardecer ,la historia preciosa me alegra que volvieras a retomarla,esperare con impaciencia,pero tu tranquilita que sere paciente un besote 

HOLA MI QUERIDA ATARDECER!!!!!!!!!!!MARAVILLOSO CAPITULO EL 10 :) MUCHISIMAS GRACIAS AMIGA POR COMPARTILO!!!!!!!!!!!!!!!!BESOSSSSSSSSS DANIELA

HOLA ATARDECER HERMOSO CAPITULO MIL GRACIAS 

Ciaoooo Esmeralda querida,

qué alegría volver a leerte, espero que estas bien.

Ya echaba de menos tus palabras, tu imaginación, tu manera de escribir.

La historia me sigue intrigando y espero que tu puedas continuar pronto.

Un fuerte abrazo, Giovanna

Buenas Atardecer!! ya has aparecido y me alegro

paso a saludarte y ya mañana con tranquilidad disfrutare de Miguel y Carla

besos

Querida DEO, muchas gracias a ti por estar ahí.

Te agradezco guapa por tus cariñosas palabras.

Un fuerte abrazo. Atardecer.

 

 

 

Hola SANDRA, muchas gracias a ti guapa por seguir su lectura y por tus palabras.

Me alegra que te haya gustado. Buenas noches. Besos. Atardecer.

 

 

 

Muchas gracias a ti VALENTINA por leerlo y por tus lindas palabras.

Es grato que te guste. Espero poder dejar pronto el siguiente.

Gracias por esa bonita rosa que me dejaste.

Un abrazo. Atardecer.

 

 

 

PAULA guapa, así que esperarás impaciente de forma paciente, no?...jaja.

Muchas gracias por leerlo y por tus cariñosas palabras.

Espero pronto poder dejar el siguiente y que te siga gustando.

Besotes. Atardecer.

 

 

 

Muchas gracias a ti querida DANIELA, por tus amables palabras.

Es grato para mí que te siga gustando esta historia.

Te agradezco ese bonito detalle que me dejaste guapa. Un abrazo. Atardecer.

 

 

 

Hola MARTHA, muchas gracias a ti por leerlo y por tus palabras.

Me alegra que te gustara. Muchas gracias por ese lindo detalle.

Buenas noches. Un abrazo . Atardecer.

 

 

 

Hola querida GIOVANNA, espero tu también bien. Me alegra saludarte.

Muchas gracias guapa por tus palabras y por leyendo esta historia. q

Que bueno que te siga intrigando. Te agradezco por ese lindo banner guapa.

Un fuerte abrazo para ti también. Atardecer.

 

 

 

Hola querida PILAR, muchas gracias guapa por tus palabras.

También me alegra saludarte. Y bueno, aunque me dejó por un tiempito, mi inspiración sigue aquí...je. O tal vez, la abandoné yo a ella...? jaja.

 Espero disfrutes de este capítulo y te guste.

Un abrazo. Atardecer.

 

 

 

Que sorpresa!!

Gracias Esmeralda por el nuevo capi, interesante e intrigante, qué pasará? no dejes de soñar y aquí seguiré esperando el siguiente.

Besos

Hola ISDI. Espero todo bien. Muchas gracias guapa por tus palabras.

Me alegra saludarte y también que te siga intrigando esta historia.

Un abrazo. Atardecer.

 

 

 

Querida MAITE, muchas gracias guapa por tus cariñosas palabras.

Me alegra que te gustara y espero que con los siguientes también sea así.

No te preocupes, en cuanto tenga el momento propicio, continuaré con ello como siempre... con cariño e ilusión.

Yo también TQM y te agradezco por estar ahí y por ese bello regalo.

Un fuerte abrazo. Cuídate. Atardecer.

 

 

 

Buenas Atardecer!!!

Sabes que desde que me digistes que la canción quedate ya las habías utilizado aquí..presto más atención a la música que pones de acompañamiento..a ver que me encuentro.. 

Que sufrimiento la de esta pareja primero por el esfuerzo de separarse, y ahora Carla esperando la llamada de él.. Miguel con esto,"no lo impidamos si?. Démonos esta oportunidad" me ha recordado al Antillano y su "dejemoslo fluir Camila" 

No te preocupes por la espera!! porque merece la pena sin ninguna duda..me encantan las historias con desgarro, las que te atrapan..tocandote en los más adentro..y tú lo has conseguido.

besos

Querida PILAR, muchas gracias por tus cariñosas y amables palabras.

De verdad que me alegra que te esté gustando y atrapando esta historia. Espero que siga siendo así, porque para mi es grato.

Respecto a lo que me comentas de las música, suelo escoger canciones que le vaya al capítulo, y a ser posible, pongo la que le va mejor a cada parte del mismo. Hay veces que es más difícil encontrar la apropiada que me convenza, dependiendo de lo relatado. Pero si que es algo que me gusta tener en cuenta, pues le da un toque a la hora de leer. 

"Quedate" de Lara Fabián la use en el capitulo 8, en la 2ª parte... En la 1ª use Adagio de ella también.

Te deseo un lindo fin de semana. Un fuerte abrazo. Atardecer.

 

 

 

HOLA,

quiero volver a retomar esta bonita y particular historia para mí, que tengo muy a pesar mío, un poco paradita, pero circunstancialmente... no he encontrado el momento propicio para poder continuar con ella y me gustaría ponerme en breve.

Para quienes seguían esta historia, o para quien le interese, subo algunos de los últimos capítulos, por si quieren continuar con ella, para refrescar un poco como iba.

MUCHAS GRACIAS a todas las que me apoyasteis con ello, por la confianza que siempre me tuvisteis esperando cada capítulo. Por ello, OS PIDO DISCULPAS y LO SIENTO de veras, pero no pudo ser antes. Espero os siga agradando.

UN FUERTE ABRAZO Y GRACIAS DE NUEVO. Besotes. Atardecer.

 

 

Y a ti querido FERNANDO,

GRACIAS por seguir siendo mi fuente de inspiración.

Un beso. Cuídate. Atardecer.

 

 

 

 

 

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