El Sol de México

21 de diciembre de 2008

No sé para ustedes, pero para mí este año se fue casi sin sentirlo, es más, no me cae el veinte, como suele decirse, de que ya llegamos a diciembre y es momento de formular los balances de lo bueno y lo malo, y echar una mirada a los aconteceres más relevantes.

* LAS BRONCAS

Es una pena, pero creo que prevalece lo desagradable, como los pleitos conyugales entre Cristian Castro y su ex, Valeria Liberman, con las tremendas declaraciones de ambos dejando mal parada a la famosa suegra Verónica Castro.

Por el estilo, pero con más decoro, surgió el divorcio entre el galán Jorge Poza y la superbella Mayrín Villanueva después de siete años de casados, casi a la par de la separación de Poncho Vera y su hasta hace poco esposa Gaby Platas.

Otro numerito que abarcó grandes titulares fueron los problemas con la ley norteamericana de Pablo Montero y sus resonancias de droga y alcohol que lo dejaron muy mal parado.

También fueron motivo de noticia los cada vez más desacreditados programas dizque de concursos, donde lo único que se busca es el morbo y el chantaje sentimental; claro, con pleitecitos entre los jueces que en la mayor de las veces quieren sentirse más protagónicos que los mismos concursantes. Esperemos que para el 2009 no tengamos que seguir soportándolos.

* LAS RESBALADAS EN EL ÁMBITO TEATRAL

Los dimes y diretes en el mundo del teatro que dieron de qué hablar surgieron en la obra Mujeres Juntas. ni Difuntas y todo porque faltó el sentido de responsabilidad y profesionalismo con el productor. También en La Muchacha sin Retorno, pues Andrés García se incomodó con el director y hasta quiso dejar la puesta.

* EXITOS DE LA TELEVISIÓN

Sin discusión, la telenovela del año corrió por cuenta de Fuego en la Sangre, producción de Salvador Mejía y guión de Liliana Abud. Es posible que al final de las transmisiones todo se haya desgastado: historia, dirección y hasta las interpretaciones, algunas muy bien logradas. El cansancio físico y mental estaba a la orden del día, resultado incomprensible de alargar y alargar lo que ya no daba de sí, pero con todo y todo la lograron hacer los hoy muy famosos \"Hermanos Reyes\" en la persona de Eduardo Yáñez, Jorge Salinas y Pablo Montero.

Otra novela que también alcanzó notoriedad es Alma de Hierro, con un Alejandro Camacho que despliega talento en cada una de sus escenas, lo mismo que Blanca Guerra. Ha servido de plataforma para el lanzamiento de un Eddy Vilard en un horario más respetable que los dedicados a las historias de juventud. Aquí el que la hace es porque es muy bueno. Destacó en un renglón especial la hermosura hecha mujer de Alejandra Barros.

También tuvimos cosas buenas como la boda de Mike Biaggio y Gloria Sierra; la llegada, por fin, de Silvia Navarro a Televisa con la novela Mañana es Para Siempre. Por su parte, también volvieron a la casa televisora que los vio nacer: Lolita Cortez, Rogelio Guerra y Fernando Carrillo.

Shalalá se posicionó como el mejor programa en su género gracias a la chispa de sus conductoras Katia D\'Artigues y Sabina Berman.

* SE MARCHARON ESTE AÑO

Nos dejaron grandes figuras de la farándula como la dulce María Elena Marqués, heroína de cientos de películas que le ayudaron a México a proyectarse en Europa; la cantante chilena Mona Bell, creadora de La Montaña y El Telegrama; el doctor Guillermo Méndez, ligado a estas actividades por su esposa, la inolvidable Emilia Guiu, y padre del compositor Memo Méndez Guiu; Paco I. Taibo, El Gato Feliz, que un día tuvo la osadía de publicar el acta original de nacimiento de María Félix y nunca se lo perdonó; el comediante Evelio, el cineasta Lorenzo Arguendo, la rubia Jacqueline Voltaire, Josefina Gil, Paco Ibáñez; los escritores Andrés Henestrosa, Emilio Carballido y Víctor Hugo Rascón Banda; Jorge Ramos Zepeda, creador de los títeres Serendipity; Servando González, realizador de Yanco y Viento Negro; Juan Diego Alonso, hijo del inolvidable Ernesto Alonso; el crítico de teatro Alejandro González Danielly y Anabel Ochoa.

GRACIAS TANYA POR LA NOTA